La ingeniería genética de plantas permite la manipulación directa del ácido desoxirribonucleico (DNA, por sus siglas en inglés), posibilitando la creación de nuevos genes, usando elementos provenientes de varios organismos y la introducción de éstos en plantas (plantas u Organismos Genéticamente Modificados [OGM]) para conferirles nuevas características. Los principales cultivos OGM son la soya, el maíz y el algodón. México está expuesto a liberaciones no controladas de OGM. La relevancia de esta liberación aumentará cuando se trate de especies cuyo centro de origen o diversidad se encuentre en nuestro país. Por lo tanto, es necesario diseñar estrategias que permitan detectar la presencia de OGM. Este trabajo tiene como objeto desarrollar y validar metodologías para la detección de OGM y sus subproductos, utilizando la técnica de reacción en cadena de la polimerasa (PCR, por sus siglas en inglés). La estandarización incluye procesos que incrementen la re-producibilidad y el uso de reactivos Fácilmente accesibles para permitir su implementación en diferentes laboratorios.